Global Futurizer 2015: Innovación y talento de las nuevas generaciones

La primera vez que escuché a mis compañeros de trabajo decir “Global Futurizer”, me vinieron a la cabeza ideas como: futuro de las tecnologías, aplicación de la innovación en nuestra vida diaria… La verdad es que no estaba del todo desencaminado.

Empecé a investigar en internet en qué consistía, temas tratados en ediciones anteriores y quiénes participaban. Pronto me di cuenta de que no iba a ser un evento común donde los distintos integrantes de las empresas participantes detallan los proyectos en marcha, sino que en este caso, los verdaderos protagonistas iban a ser estudiantes y universitarios con ganas de poner su granito de arena en el mundo de la innovación.

Global Futurizer 2015 se ha desarrollado en dos ediciones separadas y con dos universidades referente cada una en sus respectivos sectores. La edición de Barcelona junto con la Escuela Superior de Diseño Industrial (ESDI) y la edición de Madrid Campus de la Universidad Camilo José Cela y el centro universitario de Tecnología y Arte Digital (U-TAD).

Yo asistí al evento que tuvo lugar el 24 de marzo en el Campus de la Universidad Camilo José Cela en Madrid, donde, desde primera hora de la mañana ya se apreciaba un muy buen ambiente de trabajo y una muy buena organización. Los representantes de las principales empresas colaboradoras (Ferrovial, Mapfre, Repsol y Ashoka) fueron los encargados de explicar a los alumnos por qué las empresas necesitan contar con las ideas innovadoras de los jóvenes y plantearles el reto sobre el que tendrían que trabajar el resto del día. En el caso de Ferrovial, el reto planteado por Cintra fue

“¿Cómo podríamos innovar en elementos y sistemas de las autopistas para mejorar la seguridad de los conductores?”

Comenzamos a trabajar. En una primera fase de “brainstorming” los diferentes equipos plasmaban todo lo que les venía a la cabeza, espontánea y libremente, sin aplicar juicio, de modo que se generan muchísimas ideas. Ya en esta primera fase empezaron a salir ideas muy originales para poder superar el reto propuesto.

Seguidamente se empezaron a analizar y clasificar las ideas por temas, para poner orden en el caos: iluminación, tráfico, peajes, App, señales, etc. Una vez agrupadas por temas, teníamos unas pocas ideas síntesis de todas las anteriores. En este caso mi equipo entendió perfectamente desde un principio la finalidad de la actividad respirándose a la vez un gran ambiente de trabajo y una gran coordinación.

Las ideas se priorizaron usando como herramienta la matriz originalidad/dificultad y tras un debate donde cada integrante defendía su idea más original, se eligieron las tres más disruptivas y fáciles de llevar a cabo, que en nuestro equipo fueron: quitamiedos inteligentes, implementación de equipos para hacer una autopista autosuficiente energéticamente y diseño de una App multifuncional para la concesión.

Tras un merecido descanso, que aprovechamos para comer, los equipos se pusieron manos a la obra para desarrollar la idea elegida: “Quitamiedos Inteligentes”. Como parte del proceso de conceptualización, se pedía a los equipos que desarrollaran un prototipo de la solución con materiales como plastilina, plástico, algodón, muñecos, etc.

Se puede ver el prototipo final en el siguiente vídeo.

En este punto surgieron diferentes dudas, al intentar llevar la idea propuesta a un terreno lo más práctico posible. Se abordaron temas como el segmento de clientes a los que va dirigida la idea, descripción de la propuesta de valor, relación con el cliente y diferentes canales para llegar hasta él y finalmente, la estructura de ingresos de la propuesta.

Durante la última fase de “Global Futurizer” los diferentes equipos hicieron una presentación de su idea ante el tribunal, contestando seguidamente a las dudas de éste. La evaluación de cada uno de los equipos por parte del tribunal no fue una tarea nada fácil ya que, como he comentado anteriormente, el nivel de implicación de los equipos en su idea fue máxima. Tras proceder al análisis de la puntuación del tribunal, se eligió al equipo ganador beneficiario de una beca de innovación en la Universidad Camilo José Cela.

No quiero terminar sin comentar lo positivo que fue el desarrollo de esta jornada tanto para los protagonistas como para los que nos dimos cuenta del talento que tienen las nuevas generaciones para ayudar a que el día de mañana sea un poco mejor que el presente.