El encuentro de París 2015 (COP 21) será una gran oportunidad para alcanzar un acuerdo para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a escala global. En Ferrovial creemos que este acuerdo es imprescindible para facilitar las necesarias inversiones en el desarrollo de tecnologías, servicios e infraestructuras preparadas para una economía de bajas emisiones (huella de carbono), que sirvan para abordar los cada vez más preocupantes escenarios climáticos que se deducen del último informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC).
En Ferrovial nos hemos tomado muy en serio este reto y hace años que decidimos reducir drásticamente nuestras emisiones de CO2 en todo el mundo. En 2009 establecimos unos objetivos de reducción de del 21,3% en el horizonte 2020, en términos de intensidad de carbono (emisiones respecto de ventas en millones €). Hoy, estos objetivos han sido ampliamente superados; ya hemos reducido un 38% nuestra intensidad de carbono, y un 28% en términos absolutos (estamos emitiendo 226.000 Ton CO2 menos que en el año base 2009, a pesar del incremento en la actividad de negocio).
Pero más allá de los compromisos, pensamos que una economía más verde, de bajas emisiones, encierra grandes oportunidades para nuevos modelos de negocio, generadores de empleo y actividad económica. Con el objeto de crear las bases para la eclosión de la economía verde, Ferrovial preside el Grupo Español para el Crecimiento Verde, una asociación empresarial formada por empresas multinacionales con base en España, que tienen compromisos ambiciosos en materia de cambio climático, pero que también tienen una visión común en torno a las oportunidades económicas derivadas de una agenda climática ambiciosa. La Declaración de Barcelona recoge los principios de esta nueva asociación, convertida ya en un referente del sector industrial en material de sostenibilidad.
De hecho, en Ferrovial estamos ya anticipando una economía de bajas emisiones que implicará infraestructuras y servicios más sostenibles, donde sin duda la tecnología jugará un papel fundamental. Esta apuesta estratégica se plasma en diversos proyectos y modelos de negocio que hemos venido desarrollando en los últimos años. Así, por ejemplo, , la Queen’s Terminal del Aeropuerto Internacional de Heathrow ha sido reconocida como la primera terminal certificada con el BREEAM (BRE Environmental Assessment Method), uno de los modelos más reconocidos a escala global para la certificación ambiental de edificios. La terminal en completo funcionamiento emite 40% menos CO2 por debajo de lo exigido por la normativa. Esto se debe en gran medida a que la terminal cuenta con un propio centro de energía renovable que reduce las emisiones de CO2, además de un conjunto de medidas pasivas y activas que optimizar el consumo energético
Asimismo, en Ferrovial estamos trabajando intensamente en el ámbito de la “economía circular”, debido a su potencialidad para mejorar la eficiencia de la economía y reducir el uso de recursos naturales en las actividades productivas. Aspectos tales como la reutilización, el reciclaje o la gestión avanzada de residuos, se encuentran en el centro de este concepto y tienen claras implicaciones en el core busines de Ferrovial.
En la actualidad, Ferrovial Servicios está finalizando la construcción de la gasificadora de residuos de Milton Keynes, en la periferia de Londres estando prevista la puesta en marcha de la misma en febrero del próximo año, y se prepara para afrontar con éxito la construcción de su segunda gasificadora en la Isla de Wight. Frente a la incineración directa del residuo, la gasificación abre un abanico de posibilidades al obtener un gas rico en monóxido de carbono e hidrógeno que puede ser valorizado bien con combustión en calderas de vapor, bien mediante motores de mayor eficiencia eléctrica o empleado directamente para generar materias primas para la industria química, con lo que se genera mayor valor a partir del residuo.
Confiamos en que París marque un punto de inflexión en la lucha contra el cambio climático. Aunque todos descontamos que finalizará con un acuerdo global y vinculante, nos preocupa que los objetivos que se establezcan sean lo suficientemente ambiciosos no solo para evitar un incremento de temperatura media global superior a 2ºC, sino también para activar definitivamente las inversiones en proyectos vinculados a una economía de bajas emisiones. Muchos inversores esperan que exista un acuerdo ambicioso en materia de cambio climático, para lanzarse al ruedo e invertir en este tipo de proyectos. Por esto, y porque tenemos un compromiso con las futuras generaciones, no podemos perder la oportunidad que la cumbre de París nos ofrece.
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