Acortando distancias entre Asia y América

Acortando distancias

Durante las eras Paleozoica y Mesozoica existió un supercontinente formado por la unión de todos los actuales, denominado Pangea. Esto ocurrió antes de que los movimientos de las placas tectónicas separaran los continentes que hoy existen.

Tras leer el artículo publicado por Rafael Muñeco en ABC parece que el ser humano es capaz de eliminar cualquier distancia entre continentes a través de las infraestructuras del futuro. Es sorprendente que actualmente se haya proyectado una red ferroviaria que pueda unir Rusia con EEUU. Dicha infraestructura tendrá una longitud de aproximadamente 15.000 kilómetros, 9.000 ya construidos, “El Transiberiano”.

El mayor reto que presenta el proyecto, es la excavación por debajo del estrecho de Beiring, de 103 kilómetros de túnel subterráneo, el doble que el eurotunel, a muy bajas temperaturas. Las mismas inclemencias climáticas permitieron a los primeros pobladores del continente americano atravesar el congelado estrecho por la superficie hace aproximadamente 72.000 años.

Este paso será el tunel submarino ferroviario más largo del mundo. Hasta la fecha, la mayor longitud la ostenta el paso subterráneo que une las islas japonesas de Hokkaido y Honshu, de 54 kilómetros. El proyecto se divide en tres fases:

1.    Enlazar Chukotka con el Transiberiano (unión en Rusia-Mongolia-China), en total una línea férrea de 3.500 km.
2.    Horadar un túnel de 103 km por debajo del estrecho de Beiring.
3.    Construir ramificaciones de vía necesarias en Alaska (Cabo de Gales, Alaska-Columbia Británica, Canadá), en total 2.000 km.

Rusia apuesta fuertemente por el proyecto y aspira establecer una vía de tránsito de mercancías entre EEUU y Europa pero calcula que no puede poner más del 40% del total de inversión.

Este nuevo proyecto coincide con los datos registrados por el satélite europeo Envisat de la Agencia Espacial Europea (ESA) que demuestra que el deshielo de la masa ártica ha provocado la apertura simultánea de dos grandes rutas de navegación en el Océano Ártico, la del Pasaje del Noroeste de Canadá y la ruta del Mar del Norte de Rusia.

La cubierta de hielo marino en el océano ha disminuido durante los meses de verano, de 8 kilómetros cuadrados de hielo en el océano en 1979 a 4 km cuadrados en 2011.  Esto provoca que el Pasaje del Noroeste se convierta en una atajo natural para la navegación entre Europa y Asia.

Estas vías, marítima y la ferroviaria, conectarán Europa, Asia, y las dos Américas. La combinación de ambas posibilidades permitirá un transporte de mercancías más rápido y flexible. Convirtiendo a Rusia en una vía principal de conexión entre Europa y América. La inversión aproximadamente de 60.000 millones de euros podrá ser amortizada en aproximadamente 15 años o mucho menos.

Resulta sobrecogedor pensar que, un buen día, una persona pueda subirse a un tren en Madrid y viajar por tierra (atravesando a su paso un túnel de 103 kilómetros por debajo del mar en la Siberia) hasta el glaciar Perito Moreno en la Patagonia.