Reducir el consumo energético un 2,6% anual hasta 2030
Aunque todos hemos oído hablar del cambio climático, es difícil visualizar la profunda transformación que va a provocar en nuestra sociedad. Reducir las emisiones de forma que se limite el impacto sobre el clima durante el S. XXI implica modificar completamente la sociedad moderna: la manera en la que se genera y usa electricidad, la movilidad, los hábitos de consumo o incluso la producción agroalimentaria. La alternativa, mantener la estructura energética actual y aceptar sus consecuencias, probablemente implique cambios aún mayores en el largo plazo, y con toda seguridad, más dramáticos.
La Agencia Internacional de la Energía plantea que para limitar el aumento de la temperatura global a 2ºC, según los escenarios más optimistas, las naciones que forman parte de la OCDE han de llevar a cabo una reducción en la intensidad energética (consumo de energía primaria por unidad de PIB) del 2,6% anual hasta 2030.
Hablar de reducir la intensidad energética es lo mismo que hablar de aplicar soluciones de eficiencia energética. La eficiencia energética es parte fundamental para contener la concentración de carbono en la atmósfera y los efectos sobre el clima asociados, además de disminuir los costes energéticos, mejorar la competitividad y reducir la dependencia energética.
Todos los actores del sector energético posicionan a este tipo de soluciones de eficiencia como uno de los principales motores para entender la evolución en el mundo desarrollado durante los últimos años. Asimismo, son cada vez más usadas para plantear escenarios realistas de evolución de consumo —mix energético y precios—, hasta el punto de que la Agencia Internacional de la Energía le dedica cada vez más importancia en sus publicaciones y estrategia.
Soluciones innovadoras comprometidas con la sostenibilidad energética
En el campo de la eficiencia energética o la sostenibilidad energética, Ferrovial Servicios lleva años siendo un referente: desde los primeros contratos de alumbrado público —siendo la empresa pionera en el empleo de la tecnología LED—, hasta proyectos más complejos en instalaciones industriales, hospitalarias o centros de procesamiento de datos. Aplicar sistemas de eficiencia es posible en prácticamente todos los sectores y esta empresa tiene una clara apuesta por proporcionar soluciones seguras, eficaces y rentables, enmarcadas dentro de la estrategia de sostenibilidad de Ferrovial.
Una de las claves en la maduración de este negocio dentro de Ferrovial Servicios ha sido la creación del Centro de Competencia de Energía y Facility Management: la generación de un núcleo de expertos multidisciplinares que aglutina el conocimiento y las capacidades necesarias para estudiar, desarrollar y ejecutar proyectos de eficiencia energética, independientemente de su complejidad y en cualquiera de las regiones en las que opera la compañía. Utilizando un símil histórico, Ferrovial Servicios cuenta con una “masse de manoeuvre”: su ventaja diferencial de contar la flexibilidad para reforzar los proyectos más importantes, aprovechar las oportunidades y gestionar crisis, conforme a las prioridades estratégicas y con una visión a largo plazo.
Otra de las funciones principales de este Centro de Competencia es actuar como generador, repositorio y vía de transmisión del conocimiento de la sostenibilidad energética, entre diferentes geografías. El volumen de información que debemos manejar día a día, correos, documentos, aplicaciones, etc. es enorme, y hace que cada vez sea más importante la labor de almacenar, clasificar, filtrar y distribuir la información. Además, es necesario evolucionar con las innovaciones tecnológicas, inteligencia de mercado, adaptar y mejorar los procesos internos… ¡Es un trabajo que nunca termina!
Un claro ejemplo de los logros que Ferrovial Servicios ha conseguido con este Centro en España es ahorrar a sus clientes más de 200 GWh de energía en los últimos siete años. Para ponerlo en contexto, con ese volumen de electricidad podría darse servicio al alumbrado de Madrid durante dos años, hacer en AVE el trayecto Madrid-Barcelona 15.000 veces, o alimentar durante un año más de 20.000 hogares. Es una cantidad de energía muy relevante, energía que, de haberse consumido, habría significado más emisiones de CO2, más dependencia energética y, en definitiva, un mayor perjuicio medioambiental para la sociedad.
Aunque los resultados obtenidos son impresionantes, los retos a los que nos enfrentaremos en el futuro no lo son menos: para tener éxito se debe comenzar a trabajar desde este momento.
Digitalización: un software para gestionar más de un millón de variables analíticas
Ferrovial Servicios ha instalado en todo el mundo más de 300.000 luminarias LED, calderas, enfriadoras, paneles solares, sistemas de biomasa, kilómetros de tuberías, cables, sistemas de control…¿Qué más puede hacer?
En primer lugar apostar por la digitalización, con el fin de estar preparados para manejar volúmenes enormes de información y poder analizarla. Es por ello que hemos implantado una propia solución digital propia, HEFESTO, que combina sistemas propietarios y tecnología comercial off-the-shelf, para dar lugar a una solución efectiva, y eficiente. Este tecnología permite manejar más de un millón de variables de todo tipo: temperatura, caudal, energía… incluso el número de personas, sus movimientos, hábitos de consumo energético, todo aquello que explica cómo y por qué se consume energía en una instalación. Esta plataforma Internet of Things (IoT) capta datos en tiempo real procedentes de diferentes sensores y dispositivos para mejorar el rendimiento de edificios o instalaciones de alumbrado público.
Captura de pantalla de la solución digital para la gestión de los contratos de servicios energéticos HEFESTO
Adaptarse a la transformación de los servicios energéticos
Debemos ser ágiles, ambiciosos, visionarios y pasar de un modo de pensar rígido, centralizado, a la descentralización y la flexibilidad. Anticiparnos para ser los primeros en identificar el problema y dar la mejor solución, en lugar de pensar en términos de responder a las necesidades del cliente sólo cuando este nos lo pida.
El mundo de la energía va a cambiar en los próximos años. El cliente va a estar en el centro, y ya no será un sujeto pasivo que solo consume y paga. Cada vez va a estar más informado y tendrá un poder de decisión mayor. Interactuará con la red, en algunos casos, generará su propia energía y la almacenará, en su casa o en su vehículo. Todo ello va a cambiar de forma disruptiva el mercado, generará amenazas y oportunidades, a las que debemos estar atentos para hacer que Ferrovial Servicios siga creciendo.
¿Cómo conseguiremos descarbonizar nuestra sociedad para 2050? A día de hoy no están claros los medios a emplear y ni siquiera el coste que habrá que asumir. Pero hay algo seguro: no se podrá hacer sin la aportación de la eficiencia energética.
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