El trabajo, el lugar de trabajo y el trabajador en la era digital

El trabajador del futuro: con un pie en el mundo virtual

En Australia, el lugar de trabajo se encuentra en un estado de evolución, desde un espacio físico ocupado por los trabajadores a una forma de trabajar e interactuar en la que estamos conectados de manera constante. Esto se debe sobre todo a que la tecnología se ha vuelto asequible y rentable, y las compañías invierten en soluciones a nivel empresarial que están cambiando la forma en que trabajamos, transformando tanto las actividades cotidianas como las estrategias de gestión de activos a largo plazo. Con el surgimiento del trabajador digital, el progreso del trabajo irá más allá de las aplicaciones y soluciones de movilidad. Los lugares de trabajo se están transformando en una experiencia inmersiva, donde el mundo virtual se superpone a nuestros lugares de trabajo, los datos en tiempo real de los activos de nuestros clientes están siempre a nuestro alcance y los algoritmos informáticos y los empleados funcionan en armonía.

¿Cuáles son los beneficios del intercambio de datos?

Los dispositivos de uso común que recopilan y comparten información sobre la forma en que se emplean, y los datos del entorno en el que se utilizan ya han cambiado la forma en que trabajamos. ¡Hay sensores en todo! Los teléfonos, los vehículos o los relojes están constantemente compilando y computando datos, y el Internet de las cosas es la plataforma común y el lenguaje que los conecta a todos. A menudo se dice que la tecnología portátil es una de las mejores aplicaciones del Internet de las cosas, y la popularidad de los relojes inteligentes y los medidores de actividad lo respalda. La tecnología portátil está cambiando nuestro comportamiento y creando conciencia sobre hábitos de salud y bienestar físico mediante el seguimiento y captura de la actividad personal y los datos de salud. Estos datos también pueden emplearse para controlar la salud de los trabajadores, los niveles de estrés por calor o fatiga, y para guiar a las personas a tomar decisiones informadas sobre su aptitud para el trabajo. Los avances de la tecnología portátil aceleran la convergencia de los mundos digital y físico, e impulsan la introducción de las personas como activos en el Internet de las cosas. En el lugar de trabajo, el uso de datos GPS del teléfono o tableta o la identificación por frecuencia de radio portátil permiten iniciativas de trabajo seguro basadas en la ubicación para reducir el riesgo de lesiones o daños a personas, bienes o propiedades provocados ​​por el movimiento de un vehículo. Podemos evitar que los trabajadores entren de forma accidental en zonas donde tienen prohibido el acceso o en lugares peligrosos, creando incluso una zonificación dinámica en torno a activos en movimiento, como maquinaria pesada.

La tecnología mejora el conocimiento de nuestros empleados

Existen otros avances tecnológicos que están revolucionando las actividades diarias de nuestros empleados. Los trabajadores usan ahora vehículos semiautónomos para recopilar datos sobre activos lineales, y nuestros operadores los registran directamente a través de los controles de los automóviles. El uso de vehículos aéreos no tripulados (drones) se está generalizando en Australia. Se aprovecha la perspectiva que ofrecen las cámaras, evitando peligros inmediatos para los empleados y eliminando riesgos innecesarios (como trabajar a gran altura o en espacios reducidos). Los drones se utilizan para la recopilación de datos geoespaciales. Mediante el empleo de tecnología de recopilación más avanzada, podemos crear reproducciones de activos en 2D y 3D de alta resolución para contribuir a la gestión de los activos originales, realizar inspecciones y orientar actividades de diseño o planificación. Nuestros empleados pueden interactuar con los gemelos digitales de los activos en los que trabajan en 3D, permitiendo el acceso virtual a activos complejos o la ejecución de tareas de alto riesgo aumentando la seguridad de los trabajadores, ya sea eliminando el riesgo por completo o minimizando la frecuencia o duración de la tarea. La tecnología de los gemelos digitales va más allá de la fabricación o construcción, entroncando con el Internet de las cosas al fusionarse con la inteligencia artificial y el análisis de datos. Los modelos 3D son ya habituales, y las tecnologías que se crearon para los videojuegos invaden ahora el lugar de trabajo. Empleamos la gamificación de realidad aumentada y virtual en diversos sistemas complejos de gran magnitud para mejorar la forma en que nuestros empleados se relacionan entre sí y con nuestros clientes: iniciación/orientación in situ, capacitación y verificación de competencias, simulación de conatos, realización de simulaciones de proyectos virtuales e incluso capacitación completa. Estas simulaciones aumentan la comprensión y la capacidad de adaptación de las personas mediante la implementación de una situación de la vida real a través de una plataforma en realidad virtual. Se ha demostrado que una experiencia inmersiva se almacena en la mente como un recuerdo, y como tal es mucho más poderosa que la capacitación estándar.

¿Cómo influye la incorporación de datos y técnicas predictivas?

Al recopilar tanta variedad de información, los trabajadores están cada vez más capacitados para tomar decisiones en tiempo real. Contrastando los datos en tiempo real con la gestión logística avanzada, se cambia la priorización de las órdenes de trabajo, permitiendo a los trabajadores mayor flexibilidad en la priorización del trabajo emergente. Como empresa, gestionamos la información de manera efectiva y otorgamos a nuestro personal tecnología y datos fiables optimizados. Ahora podemos adaptar de manera económica los sensores de monitorización del estado de los activos a equipos heredados, haciendo que esta tecnología sea muy accesible. Incluso podemos personalizar la captura de las métricas de rendimiento del motor de la planta móvil para transmitir esta información a un panel en directo, dejándola al alcance de todos los que la necesiten en tiempo real. Utilizamos la información digital superpuesta de realidad aumentada en el mundo real, a través de dibujos, teléfonos y auriculares o gafas de realidad mixta. Hemos desarrollado inteligencia artificial para lograr visión computarizada mediante algoritmos para la identificación en tiempo real de objetos y características, lo que permite la inspección o identificación autónoma de activos o defectos. Estas plataformas futuristas de realidad mixta que utilizan computación móvil y aprendizaje automático están cambiando la experiencia de usuario para los trabajadores. Nuestros empleados valoran poder ayudar a nuestros clientes a saber más sobre sus activos y cuestionar los sistemas de mantenimiento tradicionales a través de la tecnología del Internet de las cosas. Al comprender en profundidad el rendimiento de los activos, podemos influir en la planificación de su mantenimiento a largo plazo y alejarnos de las inspecciones rutinarias y las estrategias de gestión de activos que consisten en no revisar algo hasta que falla.  La implementación de combinaciones de estos diversos sistemas de monitorización de activos nos permite hacer la transición a prácticas de mantenimiento basadas en condiciones predictivas.

¿Cómo es el trabajador digital: ha llegado el futuro?

En este mundo cada vez más digital, el valor real de los empleados en el futuro no reside en “saber” cosas: la inteligencia artificial y el aprendizaje automático de los ordenadores ya lo hacen, y cada vez más rápido. Reside en la forma en que abordamos y resolvemos los problemas, el pensamiento crítico, junto con las competencias sociales y la inteligencia emocional que se están volviendo cada vez más valiosas, pues el Foro Económico Mundial identificó el pensamiento crítico /resolución creativa de problemas como la principal habilidad para el futuro. Nuestros líderes deben saber gestionar lo antiguo y al mismo tiempo aspirar a lo nuevo. A nivel empresarial, debemos asegurarnos de que estamos facilitando a nuestro personal las habilidades y capacidad necesarias para el futuro.