Mi prioridad como CEO es invertir en nuestros empleados de primera línea. Durante la pandemia, hemos mantenido el incremento salarial de nuestros empleados de primera línea y a principios de año nos marcamos el propósito de convertirnos en un empleador que paga salarios dignos y reales, calculados de forma independiente en base al coste de la vida real; esta decisión nos ha llevado a aumentarle el sueldo a más de un cuarto de nuestros empleados. Nuestra inversión beneficiará a los que trabajan en el corazón de las comunidades; su presencia continuada da una sensación de normalidad en un momento incierto, a través del cuidado de carreteras locales, la limpieza de colegios o la recogida de residuos domésticos. Trabajos que, con razón, han recibido un nuevo reconocimiento por su labor durante la crisis.
Recientemente, hemos recibido a trabajadores de otro proveedor con un contrato de cinco años para proporcionar instalaciones y servicios de gestión de activos a Highways England, y gracias a nuestro compromiso de pagar un salario digno y real, el primer día más de la mitad de ellos se beneficiaron de un aumento de sueldo. Creemos que reconocer el trabajo bien hecho es una herramienta clave para optimizar el rendimiento de nuestros equipos, ayudando a nuestro cliente a mantener en funcionamiento la red estratégica de carreteras y a mantener seguros a los usuarios de las mismas.
Según nuestros empleados, el sueldo es solo una manera de valorar las contribuciones de las personas. Por lo tanto, además de recibir un salario digno y real, los equipos también han podido acceder a beneficios adicionales que hemos mejorado recientemente, como subsidio por enfermedad, subsidio por vacaciones, seguro de vida, pensiones y diferentes opciones de estilo de vida; y a lo largo de 2020 hemos centrado nuestros esfuerzos y actividad en torno al bienestar para ayudar a nuestros empleados a superar este difícil periodo. Para Amey, estos cambios representan una inversión significativa, pero sabemos que si nuestra gente se siente importante, también se comprometerán más y serán más productivos y saludables. Esa motivación proporciona los mejores resultados a nuestros clientes e impulsa el crecimiento y la rentabilidad de nuestro negocio a largo plazo.
Colaboración con nuestros proveedores
Amey invierte 1.100 millones de libras al año en su cadena de suministro. Tras debatirlo con nuestra agencia preferencial para la contratación temporal, estamos pagando un salario digno y real a aproximadamente 1.000 trabajadores temporales. Seguimos explorando opciones para trabajar con el resto de la cadena de suministro.
Sin embargo, la medida más útil sería que la industria avanzara en la adjudicación de contratos basados en el valor social para las personas y las comunidades, en lugar del coste más bajo. No es ningún secreto que los márgenes son estrechos dentro del sector de la subcontratación. Un enfoque conjunto garantizaría que empresas como Amey pudieran optimizar los beneficios para las personas y las comunidades, además de generar ganancias de forma sostenible.
Se han hecho grandes progresos gracias a la publicación de una Guía para la Subcontratación y un nuevo Marco de Valores Sociales por parte del gobierno, que exige una mayor atención al valor social y una evaluación explícita en los contratos públicos. Tenemos la esperanza de que este enfoque progresista sirva para beneficiar a las personas en toda la cadena de valor.
De forma paralela, hemos lanzado nuestra Carta de Cadena de Suministro de Valor Social, pidiendo a los proveedores que consideren qué valor social pueden ofrecer y cómo invertirán en su gente. También hemos firmado el Compromiso para la Movilidad Social. Reconocer la contribución de nuestro equipo y optimizar el impacto de nuestro trabajo es una labor permanente. Estoy orgullosa de que hayamos dado un primer paso importante: aumentar el salario de aquellos que marcan una verdadera diferencia en la vida de las personas.
Todavía no hay comentarios