Las caídas son la segunda causa de muerte accidental por lesiones en todo el mundo, con la friolera de 684.000 muertes al año. La seguridad y la prevención de las caídas en el trabajo en altura siguen siendo uno de los principales objetivos de las empresas de construcción.
El riesgo de lesiones o muerte por caída no solo afecta a las personas que trabajan en andamios, grandes edificios u obras de construcción. Con más de 37 millones de caídas al año en todo el mundo lo suficientemente graves como para requerir tratamiento médico, es un riesgo al que todos nos enfrentamos en nuestro día a día, en el trabajo y en casa.
En nuestro sector, hay riesgos a todos los niveles, literalmente.
No solo hay riesgos en la superficie, sino también bajo tierra, en pozos y otras estructuras subterráneas. Y, por supuesto, cuando se trabaja en altura es importante controlar el equipo que se maneja y disponer de la sujeción adecuada, ya que existe un riesgo real.
Afortunadamente, hay muchas cosas que podemos hacer para eliminar o reducir este riesgo.
Medidas que podemos tomar para hacer las cosas mucho más fáciles y seguras.
Las siguientes medidas, por experiencia, también pueden ayudar a aumentar la producción y mejorar la calidad del trabajo en la obra. Solo en el caso, claro está, de que las personas estén plenamente concentradas en una tarea.
Los EPI, como arneses y componentes de amarre para la prevención de caídas, son un mecanismo de seguridad esencial, pero no debemos depender solo de ellos. Siempre debemos buscar formas alternativas de eliminar o reducir los riesgos.
Que las personas tomen mayor conciencia de la situación es una de las cosas más importantes en nuestro sector. Es normal que la gente no sea consciente de que se está poniendo en riesgo, ya sea porque no ve el peligro o porque se confía demasiado.
También es importante animar a la gente a mantener conversaciones dentro de sus equipos sobre la planificación y ejecución del trabajo.
En julio, Ferrovial llevó a cabo una Campaña mundial sobre el trabajo en altura en la que se plantearon a los empleados las siguientes preguntas, para animarles a identificar los riesgos y mejorar la comunicación entre los equipos: ¿Qué cambios se han producido entre la planificación y la ejecución? ¿Qué riesgos y peligros imprevistos han surgido? ¿Qué controles de riesgo se han ignorado y de qué forma se han improvisado y modificado las acciones sobre la marcha?
Como resultado, los equipos conversaron acerca de lo que se podría hacer de forma diferente o mejor, y eso les animó a hablar sobre el tipo de riesgos a los que se enfrentan.
Si podemos dedicar tiempo a mantener estas conversaciones en el momento oportuno, podremos identificar las soluciones adecuadas para protegernos a todos. Mi equipo y yo creemos firmemente que las personas que hacen el trabajo tienen buenas propuestas. Pero no es hasta que se inician las conversaciones cuando empiezan a evidenciarse los riesgos potenciales.
Es importante que las conversaciones no sean demasiado largas. Por lo general, una conversación corta y seria, con una escucha activa, tiene más impacto que una conversación larga.
¿Cómo organizar una campaña interna de salud y seguridad?
La forma en que hemos llevado a cabo la Campaña sobre el trabajo en altura de este año puede servir de guía para quienes deseen organizar su propia campaña interna de salud y seguridad.
Para empezar, la campaña se realizó en español, inglés y polaco, para conseguir la máxima participación en todos los niveles de la organización y en todas las zonas geográficas en las que opera Ferrovial.
Recurrimos a un director operativo, en lugar de al equipo de salud y seguridad, para que dirigiera la campaña y animara a la gente a participar. Esto ayudó mucho a que el mensaje llegara a todos.
Utilizamos Yammer, una plataforma de comunicación interna, para generar interés, pidiendo a los trabajadores que publicaran el contenido de sus conversaciones y compartieran fotos de sus equipos. Las personas que compartieron sus conocimientos y experiencias con toda la empresa a través de Yammer, ayudaron a potenciar el alcance de la campaña.
Conectamos con muchos empleados, con unas 56.000 lecturas de los cientos de posts sobre la campaña. Al mismo tiempo, animamos a nuestros directivos a interactuar con los posts, reconociendo la labor de los equipos y motivándolos para que siguieran haciendo tan buen trabajo.
Por último, intentamos reducir al mínimo el papeleo y los informes, ya que no queríamos que fuera algo tedioso. Se trataba de animar a la gente a participar, pero haciéndolo fácil.
Algunas historias internas de la campaña:
- Mantuvimos una conversación abierta con el equipo de la autopista de peaje A-66 Benavente-Zamora, en España. Nos dijeron que era un «formato nuevo e interesante» para una campaña de salud y seguridad y que era una gran oportunidad para que los empleados alzaran la voz, compartieran experiencias y opiniones, identificaran los riesgos y las medidas preventivas y sugirieran formas de crear un entorno de trabajo más seguro.
- El equipo de Webber que trabaja en el proyecto de la carretera FM-156 en Fort Worth, Texas (EE.UU.), celebró una jornada de protección contra caídas en la que el personal renovó su compromiso con la seguridad personal en el trabajo y con la promoción de estos valores entre sus compañeros.
- En Virginia (EE.UU.), Tommie Callahan, director de seguridad de North Perimeter Contractors, nos contó que su equipo mantuvo una conversación «muy sincera e instructiva», a la que asistieron el director general, el director ejecutivo de construcción y muchos altos cargos del proyecto.
Mejorar la sensibilización frente a los riesgos mediante la tecnología y el factor humano
Como equipo, siempre buscamos formas innovadoras de mejorar la formación y la concienciación en materia de salud y seguridad. Tenemos la suerte de contar con muchas personas muy inteligentes en nuestra empresa —ingenieros, diseñadores, jefes de proyecto— que buscan formas de «eliminar» los riesgos y reducir el tiempo de trabajo en altura.
Para mejorar la concienciación ante los riesgos, estamos desarrollando un tipo de formación en realidad virtual. De esta forma, podremos estimular la percepción de los peligros por parte de los participantes sin que se expongan a ellos, y podrán practicar la aplicación de controles para minimizar el peligro. Está previsto que la fase de prueba finalice a finales de año.
También estamos estudiando factores humanos, como la salud mental y el bienestar, y su efecto en la seguridad en el trabajo. Las presiones familiares o económicas pueden hacer que tengamos la cabeza en otro sitio mientras estamos trabajando. Esto puede llevar a confiarse demasiado, a no tener conciencia de la situación y del riesgo y a tomar malas decisiones. Todo ello puede crear el escenario perfecto para que se produzca un accidente.
Es importante velar por el bienestar de las personas y asegurarse de que cuando vengan a trabajar estén contentas, descansadas y con el estado de ánimo adecuado.
¡Cuidaos!
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