¿Qué tienen en común una cesta elevadora y la seguridad de los trabajadores de carreteras?

Para muchos de nosotros, una autopista es una herramienta esencial que nos lleva del punto A al punto B. Algunos dependen de ella a diario para ganarse el sustento y otros la utilizan para escapar a lugares lejanos. En cualquier caso, estoy seguro de que la mayoría de las veces ni siquiera somos conscientes de lo mucho que las autopistas nos facilitan la vida.  

Sin embargo, cuando hay un problema, como un accidente o escombros en la calzada, nuestra cómoda herramienta se transforma en un aparcamiento. Aquí es donde entra en acción mi equipo. Para que nuestros conductores puedan seguir moviéndose con rapidez y seguridad, mi equipo trabaja duro las 24 horas del día, no solo para solucionar los problemas que surgen, sino para evitar que se produzcan. La I-77 Express y los carriles de uso general están formados por 400 km de carriles por los que cada día circulan miles de coches a una velocidad de 110 km/h mientras nuestro personal trabaja duro. No hace falta decir que este no es el típico trabajo de oficina.  

La seguridad es la clave 

Es evidente que la construcción de autopistas y carreteras es una empresa difícil, pero su mantenimiento también puede ser difícil, laborioso y, por supuesto, peligroso. Dada la cantidad de trabajo que hay que hacer, los miembros de mi equipo están sobre el terreno a todas horas, tanto de día como de noche, podando árboles, recogiendo basura y escombros, haciendo tareas de jardinería, reparando señales, ¡lo que haga falta! Ahora bien, cualquiera que haya hecho trabajos de jardinería o presenciado los trabajos de limpieza de las playas, sabe lo laborioso y concienzudo que puede llegar a ser.  

Y, además de los aspectos difíciles del trabajo, el mantenimiento de carreteras también puede ser bastante peligroso. Cuando empecé como técnico, experimenté de primera mano los peligros a los que se enfrentan nuestros trabajadores de carreteras en su día a día; como recoger objetos afilados, estar expuestos a productos químicos agresivos y, por supuesto, el tráfico. Ahora, como supervisor de mantenimiento diurno, tengo la oportunidad de trabajar con un equipo increíblemente innovador que no solo hace que nuestro trabajo sea más eficiente, sino que ha mejorado enormemente la seguridad de nuestros trabajadores de carreteras. Estas son algunas de las genialidades que ha ideado mi equipo: 

• El rociador a presión 

Básicamente, es un gran camión con un rociador en la parte delantera y un contenedor de herbicida en la parte trasera, que permite a nuestros chicos rociar el herbicida desde la seguridad del interior del camión. Antes de su invención, un miembro del equipo se encaramaba en la cesta de la parte trasera de un camión o caminaba junto a la carretera, y en ambos casos sin ninguna protección en caso de accidente. Ahora, con el rociador a presión, nuestros trabajadores están a salvo dentro de una «burbuja protectora. El rociador a presión también permite al usuario controlar la presión de la pulverización, minimizando la exposición a productos químicos agresivos. Esta nueva máquina no solo es mucho más segura para nuestros trabajadores, sino que también nos permite hacer en una noche lo que antes nos llevaba dos semanas 

• La recortadora de arcenes 

La lluvia que se acumula en el arcén de una autopista puede ser bastante peligrosa para los conductores, así que cuando llueve mucho, mi equipo está en el arcén retirando el agua. Antes de la invención de la recortadora de arcenes, había que hacerlo a mano con palas. Nuestro equipo caminaba junto a la carretera limpiando los arcenes, completamente expuesto a la lluvia y al tráfico. Con la invención de la recortadora de arcenes, la máquina puede eliminar rápidamente el agua del arcén a un ritmo mucho más rápido, mientras nuestros trabajadores están cómodamente sentados dentro del vehículo, lo que evita accidentes de tráfico y ayuda a garantizar la integridad física de nuestros trabajadores.  

¿Qué será lo próximo? 

No hay duda de que el trabajo que realiza nuestro equipo es difícil, pero es increíblemente gratificante conducir por la I-77 Express disfrutando del hermoso paisaje de Carolina del Norte y saber que hemos ayudado a conservar su belleza natural.  

Pero siempre estamos buscando nuevas formas de mejorar nuestro trabajo. Como innovadores, nuestro equipo continuamente está pensando en ideas novedosas y tratando de hacer nuestro trabajo más seguro y eficiente. En los últimos 10 años, he sido testigo de grandes avances en la maquinaria de mantenimiento de carreteras y estoy seguro de que los próximos 10 años traerán consigo inventos aún más impresionantes a medida que la tecnología siga avanzando. Todavía no sé cuál será nuestro próximo proyecto, pero una cosa está clara: la seguridad de nuestros conductores y trabajadores es nuestra máxima prioridad.