Elementos críticos de un vertipuerto y por qué la sostenibilidad es esencial para su éxito

Todo lo que despega debe tener un lugar seguro donde aterrizar.  Este sencillo concepto es la base de la necesidad crítica de una infraestructura que tiene la movilidad aérea urbana avanzada (UAM, por sus siglas en inglés), o lo que conocemos como «vertipuertos».  Y, al igual que hay múltiples tipos de aeronaves eléctricas de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL, por sus siglas en inglés), que se abren camino a través de la certificación, los propios vertipuertos también se presentarán inevitablemente en diversos tamaños y ubicaciones.   

Precisamente por eso, nos hemos comprometido a construir infraestructuras que sean polivalentes, adaptables a cualquier modelo de negocio, operador o tipo de aeronave.  Dicho esto, también creemos firmemente que hay elementos comunes que deben tenerse en cuenta e incluirse en cualquier diseño para mejorar las operaciones generales, la experiencia del cliente y la aceptación por parte de la comunidad. 

En términos sencillos, un vertipuerto puede dividirse en dos áreas funcionales principales: lado tierra y lado aire. 

El lado aire de un vertipuerto

Hablemos primero del lado aire de un vertipuerto.  Aquí es donde las aeronaves despegan, aterrizan, se recargan, circulan, o son remolcadas hasta el puesto y, en algunos casos, pasan por mantenimiento. También es la zona donde los pasajeros embarcarán y desembarcarán de la aeronave.  

El diseño de los elementos del lado aire de nuestros vertipuertos se basará principalmente en factores normativos y de seguridad, al igual que en un aeropuerto. Estos factores incluyen el espacio entre los eVTOL, la distancia entre la zona de aterrizaje y la puerta de embarque, la capacidad de recarga, y el espacio aéreo en el que pueden operar de forma segura, eficiente y eficaz.   

Esperamos que nuestros vertipuertos tengan entre dos y ocho puestos (piensa en puertas o posiciones de estacionamiento de aeronaves), en función de la demanda, la disponibilidad de terrenos, el coste de construcción y el coste de explotación de cada vertipuerto. Teniendo en cuenta el tamaño del avión, su peso y, lo que es más importante, su capacidad para despegar y aterrizar verticalmente, prevemos que un vertipuerto puede construirse en un terreno de entre 4.000 y 12.000 metros cuadrados. Es una superficie bastante compacta, si se tiene en cuenta que la mayoría de los aeropuertos comerciales se construyen en terrenos de centenares de hectáreas vacías. 

Estas zonas aéreas deben ser capaces de soportar el gran volumen de operaciones que se espera de la aeronave eVTOL, el empuje a la salida y a la llegada, así como el peso y el tamaño totales de la aeronave. Por otra parte, estamos estudiando varias opciones de superficies que ayuden a captar y reutilizar el agua de lluvia, y que puedan contribuir a atenuar el ruido generado por las aeronaves, aunque ya son considerablemente más silenciosas que los helicópteros o los aviones.

Otros elementos importantes en lado aire: 

• Infraestructura eléctrica y de carga: las aeronaves eVTOL necesitan una gran cantidad de energía de la batería para despegar y aterrizar, por lo que los vertipuertos deben proveer la energía necesaria para entrar y salir de la instalación, junto con la infraestructura de carga asociada para mantener la aeronave preparada. 
• Consideraciones meteorológicas: los vertipuertos deben estar diseñados para operar en condiciones meteorológicas adversas y proteger a las aeronaves y a los pasajeros de éstas.
• Sistemas de seguridad: los vertipuertos deben contar con medidas de seguridad para proteger a los pasajeros, el personal de tierra y las aeronaves para evitar el acceso no autorizado al lado aire.
• Reducción del ruido: aunque los eVTOL son mucho más silenciosos que los aviones o helicópteros tradicionales, los materiales y medidas de reducción del ruido pueden minimizar aún más el impacto en la comunidad circundante.

El lado tierra de un vertipuerto

En cuanto al lado tierra, los elementos comunes incluirán una terminal de pasajeros y una zona peatonal por la que los pasajeros acceden y salen del vertipuerto.  Estos dos elementos cruciales son similares a los aeropuertos actuales, pero también son dos áreas en las que un vertipuerto puede diferenciarse, ofreciendo una experiencia más eficiente y potencialmente superior para el cliente.  

Dado que los eVTOL transportarán inicialmente un número de pasajeros menor, pero operarán un alto volumen de vuelos, no es necesario un edificio grande y extenso.  De hecho, dependiendo del número de puestos, las instalaciones podrían tener entre 140 y 325 metros cuadrados. Ya que parte de la promesa de la Movilidad Aérea Urbana es el ahorro de tiempo, los tiempos de espera serán significativamente más cortos para los pasajeros y, por tanto, habrá menos necesidad de un espacio adicional o servicios como restaurantes o tiendas más grandes, aunque la oferta comercial es totalmente factible en ciertos destinos.   

Emplearemos los amplios conocimientos que hemos adquirido en el desarrollo y explotación de algunos de los mayores aeropuertos del mundo, así como nuestra extensa formación en mejorar la experiencia del cliente a través del diseño, construcción y explotación de estas nuevas instalaciones.    

Por ejemplo, nuestros vertipuertos se abastecerán de luz solar y otras fuentes de energía renovable para crear una infraestructura energéticamente eficiente. Siempre y cuando sea posible, la energía externa procederá de fuentes respetuosas con el medio ambiente, lo que permitirá reducir a cero las emisiones de carbono para mejorar aún más la sostenibilidad de esta nueva forma de transporte. 

Otro elemento importante de un vertipuerto de Ferrovial será la integración de tecnologías avanzadas. Esto incluye el uso de la automatización y la inteligencia artificial para agilizar las operaciones y ofrecer a los pasajeros una experiencia personalizada. Por ejemplo, se espera que los pasajeros puedan utilizar no sólo sus móviles, sino también datos biométricos y otras plataformas digitales para facturar, embarcar en su vuelo, seguir los horarios en tiempo real y organizar conexiones para llegar antes y sin problemas a su destino final.

Las características comunes del lado tierra incluyen:

• Zonas de espera para pasajeros: aunque se espera que los tiempos de espera para los vuelos sean cortos, de un máximo de 15 minutos, los vertipuertos todavía necesitan tener áreas de espera cómodas para los pasajeros, incluyendo servicios tales como zonas de descanso con amplias estaciones de carga para dispositivos, baños, wi-fi, y posiblemente pequeños espacios comerciales.
• Medidas de seguridad: los vertipuertos contarán con medidas de seguridad acordes, pero se prevé que sean mucho menos evasivas y requieran mucho menos tiempo que las que se aplican actualmente en los aeropuertos comerciales tradicionales.
• Experiencia del pasajero mejorada tecnológicamente: seguridad, facturación y gestión de equipajes, así como actualizaciones automáticas del estado de los vuelos.
• Acceso cómodo a su destino:  El acceso a los vertipuertos debe ser rápido, cómodo y rentable. Por eso, nos centramos en situar los vertipuertos cerca de donde está la gente. Utilizando Big Data y nuestra propia herramienta de demanda, esperamos que los clientes puedan, en muchos casos, llegar a pie a su destino final. Si no se puede llegar a pie, el objetivo es garantizar un acceso rápido a un taxi, a servicios de transporte compartidos u otras formas de transporte público para llegar a su destino. Del mismo modo, siempre que se disponga de terreno suficiente, prevemos ofrecer aparcamiento suficiente para permitir a los clientes aparcar su vehículo privado junto al vertipuerto o utilizar un servicio de aparcacoches, para acelerarles el camino.  

La sostenibilidad como eje central

Por encima de todo, e independientemente del tamaño o la ubicación, la sostenibilidad siempre es prioritaria para nosotros a la hora de diseñar, construir y explotar una red de vertipuertos.  Como se espera que la movilidad aérea urbana se convierta en una parte importante de nuestro sistema de transporte en el futuro, es importante garantizar que la infraestructura que construyamos hoy sea capaz de soportar las necesidades de mañana. Esto significa preparar los vertipuertos para que puedan acoger eVTOLs de segunda, tercera y cuarta generación que aún no están en fase de diseño, así como formas de energía nuevas, que sean limpias e innovadoras, como el hidrógeno.  

También significa garantizar que la sostenibilidad esté en el centro de todas las operaciones.  Esto incluye el uso de materiales sostenibles en la construcción de vertipuertos, el uso de fuentes de energía renovables, siempre que sea posible, para alimentar la infraestructura, y un diseño que maximice los beneficios sostenibles para las comunidades locales.

Contamos con una amplia experiencia en proyectos de infraestructura, pero también en materia de sostenibilidad. Tenemos un equipo de profesionales dedicados a ofrecer la mejor experiencia posible a los pasajeros, a los operadores de aeronaves eVTOL, y a las comunidades a las que deben servir.

En resumen, nos enorgullece desempeñar un papel clave en la transformación del futuro de la movilidad urbana. Es emocionante estar a la vanguardia de esta revolución del transporte, ya que introducimos vertipuertos sostenibles y cómodos que descongestionarán las ciudades y ayudarán a proteger el medio ambiente en las próximas décadas.