¿Cuánto tardaremos en ver los vehículos sin conductor circulando por nuestras carreteras?
30 de noviembre de 2020
Si echamos la vista atrás, en todas las películas y dibujos que veíamos de pequeños, los vehículos autónomos siempre eran una visión del futuro. Aunque muchos de nosotros esperábamos que los vehículos autónomos ya fueran una realidad, la guía de Bloomberg sobre la carrera actual en pos de los coches autónomos (en inglés) demuestra que hay muchos actores dispuestos a acercarnos esta tecnología más pronto que tarde.
Uno de los avances durante la pandemia de la COVID-19 ha sido la creación de coches y drones de reparto automatizados que ayudan a la gente a conseguir los alimentos que necesitan. Esta pequeña innovación pone de manifiesto el enorme potencial de los vehículos autónomos en nuestra sociedad.
A medida que la tecnología de los vehículos autónomos continúa desarrollándose, tanto los fabricantes como los gobiernos son cada vez más conscientes de la necesidad de crear infraestructuras físicas y legales que respalden tales innovaciones. En este sentido, este artículo resume lo lejos que hemos llegado en lo que se refiere al desarrollo de los coches autónomos, y lo mucho que todavía nos falta por recorrer.
La situación actual
El artículo de Bloomberg señala el hecho de que fabricantes de vehículos como General Motors y Daimler se han retractado de sus promesas de poner en circulación sus vehículos autónomos o han eliminado los plazos en favor de un programa más abierto. La cuestión es que muchos de estos fabricantes habían fijado el año 2020 como fecha límite para que estos vehículos autónomos salieran a la venta, pero nadie podría haber predicho la paralización masiva de la fabricación ocasionada por la COVID-19. Sin embargo, Tesla todavía espera cumplir su objetivo de un millón de taxis autónomos en circulación para el próximo año.
De hecho, la promesa de Tesla de crear taxis autónomos refleja el potencial que tienen los vehículos autónomos para revitalizar sistemas de transporte completos. Aunque con seguridad habrá toneladas de vehículos privados autónomos en la carretera, esta tecnología puede ampliarse para abarcar otras modalidades de transporte. Después de todo, ¿quién dice que no podemos tener autobuses y tranvías autónomos también?
Pero no nos adelantemos, conviene señalar que el software en sí mismo no existe todavía. Cuando se empezaron a desarrollar los vehículos autónomos, pronto se hizo evidente que la tecnología debía ser lo más completa posible para que fuera lo suficientemente segura. Los incidentes de vehículos autónomos que chocan contra farolas (y a veces incluso contra personas) indican que esta tecnología aún debe perfeccionarse.
Investigadores de la Universidad de Munich están desarrollando un software de vehículo autónomo que predice las variaciones de la situación vial en cuestión de milisegundos. Este es el tipo de tecnología de predicción que debe adoptarse para que los vehículos autónomos sean realmente accesibles para todos.
Las actualizaciones son también un factor muy importante a tener en cuenta en relación con este tipo de software. Estas deberán ser inmediatas para prevenir accidentes antes de que ocurran, y a la vez fácilmente descargables para mantener una experiencia orientada al usuario.
La infraestructura necesaria
Para que los vehículos autónomos sean realmente seguros en la carretera, es necesario que existan soluciones tecnológicas que permitan que los coches se comuniquen entre sí y con el mundo que los rodea. Esta perspectiva general de la tecnología de vehículos conectados de Verizon Connect sugiere que los sistemas vehículo a vehículo (V2V) permitirán la comunicación de corto alcance. Mientras que la comunicación vehículo a infraestructura (V2I) depende de los datos recogidos por sensores inteligentes para transmitir datos como los atascos y las condiciones meteorológicas a los vehículos en circulación.
Esta idea se ve reflejada en nuestro artículos sobre El futuro de las carreteras, que no hace sino poner de manifiesto que la circulación de los vehículos autónomos exigirá un gran esfuerzo, no solo por parte de los fabricantes de automóviles. Como dice el artículo, la infraestructura inteligente requerirá incluso la reforma de los peajes de seguridad para garantizar que tengan más sensores y entradas controladas.
La infraestructura física no es el único sistema que debe establecerse para los vehículos autónomos, también es necesario establecer una infraestructura legal, tanto a nivel local como internacional, para garantizar que estos vehículos sean seguros. Hace poco, un operador de seguridad del programa de coches sin conductor de Uber ha sido acusado de la muerte de un peatón ocurrida en 2018. El tiempo transcurrido entre el incidente y esta sentencia pone de relieve que los legisladores todavía están en proceso de determinar las normas y reglamentos para estos vehículos autónomos, especialmente porque la tecnología ha demostrado que todavía tiene que ser perfeccionada para garantizar la seguridad de todos.
La promesa de los vehículos autónomos se ve muy bien sobre el papel, pero la realidad es que todavía queda mucho trabajo de base por hacer para cumplir este sueño. La pandemia ha impedido que estas innovaciones salgan al mercado por ahora, por lo que parece que no hay un plazo claro para que podamos verlas.
Sin embargo, este contratiempo en realidad puede ser una ventaja para los fabricantes, que pueden tratar de perfeccionar sus productos y asegurarse de que los vehículos autónomos estén realmente listos para la carretera.
Todavía no hay comentarios